
Todos hemos sido llamados a la construcción del “edificio espiritual”, la Iglesia. Hoy recordamos nuestros templos, históricos y hermosos. Pero ante todo celebramos las vidas de quienes hacen presente a Cristo, pues «donde están dos o tres reunidos en Mi nombre, allí estoy Yo en medio de ellos». (Mt 18, 20)
Hoy recordamos el documento, que por gracia de Dios dio origen, a través de San Juan XXIII, a esta porción de la Iglesia puertorriqueña. Pero ante todo recordamos a los misioneros, a los movimientos que dieron vida y pusieron en práctica ese documento.
Hoy, celebremos a los abuelos, a los tíos y padrinos que transmitieron la fe, pero celebremos también hoy a las familias que tienen la valentía de vivir su fe. A los matrimonios que contra todo secularismo se levantan para decir «Mi familia y yo serviremos al Señor». (Josué 24,15)
Celebremos a todos los jóvenes valientes que caminan viviendo y anunciando su fe. A todos los padres que no solo acuden para bautizar a sus hijos, sino que cumplen la promesa de educarlos en la fe, pues ésa es la vocación a la que Dios los ha llamado.
En este aniversario 59 de la Diócesis de Arecibo nos atrevemos a proclamar: ¡Bautizado, vive tu fe! Sobre ti también se construye la Iglesia, cuya roca angular es Jesucristo. Caminemos firmes en la fe como templos de Dios, recibiéndolo en cada uno de nosotros a través de la comunión en la Santa Misa.
Con mi bendición y felicitación,
+ Daniel Fernández Torres
Obispo de Arecibo