El amor verdadero es una gran inversión. Siempre que lo damos a los demás nos produce buenos dividendos. (De Sales)
Si haces lo que no debes, recibirás lo que no quieres.
Hay personas a quienes nunca podremos complacer, hagamos lo que hagamos. (Crane)
Con la concordia y la paz hasta los pobres progresan. Con la discordia y la guerra, hasta los ricos se arruinan. (Salustio)
Dichosos los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios.
Si esperamos a que todas las condiciones sean perfectas, antes de actuar, nunca actuaremos. (Mandino)
Analicemos el pasado, si queremos preparar bien el futuro. (Franklin)
El mal de mi pueblo es que no dedica a tiempo a pensar y meditar. (Profeta Oseas)
O controlamos nuestras actitudes, o ellas nos controlarán a nosotros. (San Agustín)
Quien se instruye, está adquiriendo riquezas espirituales para su alma. (Balmes)
Dichosos los puros de corazón porque ellos verán a Dios. (Mt. 5, 3)